miércoles, 10 de julio de 2019

Game Design - Pautas y normas

Consejos para ser Game Designer


Por desgracia, no existe una teoría infalible sobre cómo convertirse en un buen diseñador de videojuegos, sin embargo, existen una serie de pautas que nos pueden hacer de guía para conseguir hacer un mejor juego. A lo largo de esta serie de artículos intentaré profundizar en ellas.


Céntrate en lo fundamental

Algo que pude comprobar en la universidad, era la diferencia que había entre los alumnos más jóvenes y yo (que ya empiezo a peinar alguna cana) en cuanto al modo de ver los videojuegos. Creo que es un error centrarse en las nuevas súper producciones que están saliendo ahora al mercado, por el simple motivo de que para hacer el nuevo Grand Theft Auto, antes tienes que saber qué hace que el Super Mario Bros sea tan buen juego. Si no eres capaz de entender qué fue lo que hizo que un juego como Pacman sea considerado uno de los juegos más adictivos de la historia, es imposible entender qué hace grande a los juegos de hoy, mucho más complejos.  Una cosa hay que tener clara, aquellos factores que hacían que esos juegos fuesen divertidos son los mismos factores que hacen que un juego actual sea divertido. Los juegos que consiguieron atraer al público durante los primeros años de existencia de este tipo de ocio tenían unas peculiaridades que debemos aprender como diseñadores.




Habla con la gente

Un diseñador siempre tiende a utilizar lo que ya conoce, a encerrarse en sus ideas y le cuesta mucho salir de ahí. El mejor modo para evitar encasillarte es hablar con otras personas, tanto desarrolladores o usuarios podrán ofrecerte nuevos puntos de vista a los que tú nunca habrías llegado. Uno de los problemas que tienen los diseñadores es el "síndrome de la madre/padre". Al ver nuestros proyectos como a "nuestro pequeñín", tendemos a ver solo sus bondades e ignorar sus defectos. Es muy importante aprender a no tomarse de forma personal el feedback de otra persona, ya que solo te está dando su opinión, y créeme, es mucho mejor que te tire el juego por tierra una persona a la que se lo has enseñado a que lo haga toda la comunidad de usuarios en cuanto salga a la venta.
Un videojuego bebe de todas las artes, al fin y al cabo incluye literatura, pintura, fotografía, cine, música... Es mucho más inteligente aprovechar los estudios que se han hecho ya en cada uno de estos campos y no reinventar la rueda en cada desarrollo.


Conexiones entre elementos

Como habéis podido descubrir, el diseño de un juego no es nada fácil, todos los elementos están interconectados y cambiar alguno de ellos afecta al resto del mismo modo que llegar a comprender un único elemento ayuda a comprender los demás.   
Ya que estamos siguiendo los pasos de Schell, vamos a comenzar creando nuestro mapa de conexiones sobre un lienzo en blanco. Lo primero será añadir el primer elemento a este mapa, el diseñador. A medida que vayamos comprendiendo las distintas conexiones entre elementos podremos ir expandiendo nuestro mapa, podemos verlo como un árbol de habilidades que iremos consiguiendo a medida que nuestro conocimiento vaya aumentando.


Aprende a pensar

Esto es un proceso de continuo aprendizaje, donde tienes que estar formándote constantemente. Es importante no tomar este blog como un dogma y buscar más referencias y conocimiento en tantos sitios como sea posible. Esto que acabo de comentar, lo he comprobado yo mismo tanto en mis compañeros de clase como en otras universidades en las que he estado, donde los alumnos que se han conformado con lo dado en clase no son capaces de desenvolverse por sí mismos, mientras que aquellos que se han esforzado aprendiendo por su cuenta, además de tener una base mucho más sólida, están acostumbrados a buscar soluciones cuando se presenta un problema. Para ser un buen diseñador, no va a ser suficiente con aprender los principios básicos de diseño, hay que aprender a pensar y saber cómo aplicarlos a cada proyecto.


Nunca te conformes

Este principio está ligado al anterior. No te estanques, absorbe todo el conocimiento que puedas, habla con otros desarrolladores, haz que la gente pruebe tu juego y te diga lo que opina sobre él. En el desarrollo de un videojuego, existen mil maneras de hacer lo mismo y ninguna tiene por qué ser mejor que otra, sin embargo, nuestro deber como diseñadores es intentar descubrir la más óptima para nuestro proyecto. No creas que por estudiar mucho este u otro blog, por leer muchos libros vas a ser buen diseñador. El diseño es una actividad y la mejor manera de convertirse en un buen game designer es mediante la práctica, consiguiendo experiencia, probando y compartiendo ideas.


El juego no está hecho para ti

Otro de los grandes errores que he visto hablando con estudiantes de videojuegos y con desarrolladores profesionales, es que hacen el juego que a ellos les gusta. Un desarrollador de videojuegos, ya sea profesional del sector o estudiante en formación, no es un target común. No hay que hacer el juego que a ti como diseñador te gusta, hay que hacer un juego que le guste al público que lo va a comprar. Si quieres aumentar las posibilidades de éxito de tu juego, lo mejor que puedes hacer cuando comienzas la preproducción es un estudio de mercado fijándote en los géneros que funcionan (a tu nivel, no quieras compararte con Electronic Arts) y qué tipo de público consume ese género, ya que deberás orientar todo tu esfuerzo en hacer un juego que le guste a ese tipo de usuarios.



Una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil

Esto es algo muy importante a la hora de trabajar en equipo aunque no esté directamente relacionado con el game designer. Durante muchos años yo me dediqué a montar equipos de sonido y durante esa etapa de mi vida aprendí que de nada sirve tener los mejores giradiscos o reproductores de CD del mercado si el altavoz por el que se reproducía el sonido luego era el más barato. Del mismo modo, tampoco es útil tener los mejores altavoces, si el encargado de reproducir el sonido falla. El sonido, al igual que nuestro proyecto, es una señal que se propaga por todos los componentes del equipo, de modo que en cuanto un componente falle, la señal a raíz de ahí perderá calidad, en el caso del desarrollo de videojuegos pasa lo mismo. De nada sirve tener el mejor equipo de artistas gráficos si falla el sonido, la programación o el diseño. Es esencial tener un equipo equilibrado


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